Entrenamientos

Formamos parte de un equipo de amigos que juegan al fútbol sala. Hay dos palabras esenciales, que son "amigos", y "equipo". Debemos alcanzar un equilibrio, para que seamos competitivos, pero sin olvidar que solo jugamos para divertirnos. Para ello hay una serie de normas básicas que todo equipo, por muy de amigos que sea, debe respetar.

Después de mucho insistir, tenemos una hora de pabellón para nosotros solos. El objetivo es estar en forma, y si es posible, mejorar como equipo. Para eso es imprescible que todos acudamos a los entrenamientos siempre que podamos. De hecho, se supone que jugar nos divierte, relaja y entretiene, así que no debería ser un esfuerzo.

Creo que estaremos todos de acuerdo:

1) Salvo que alguien diga lo contrario, se da por supuesto que todos iremos a todos los entrenamientos. No es lógico andar llamando a todos para ver si van a ir; debe ser al revés.

2) Si te es imposible ir, es obligatorio avisar con antelación de que no vas a asistir a un entrenamiento. De ese modo, los compañeros podrán buscarte un sustituto para que cuadren los números a la hora de hacer equipos para jugar. Si incumples esto, no tienes derecho esa semana a pedirle a otro compañero que sí que cumplió a que se quede fuera para que tú, que perjudicaste a todo el equipo, juegues. Cualquiera con un mínimo de sensibilidad se da cuenta de esto.

3) No pasa nada por faltar algún día, si tienes trabajo, enfermedad, o alguna otra causa que te imposibilite ir; jugarás igualmente el fin de semana si te toca. Sin embargo, no sería justo para los demás que alguien se salte los entrenamientos porque prefiere hacer otra cosa, y después ande exigiendo jugar los partidos de competición. Si jugar un partido durante una hora a la semana te parece una pesada obligación que supone mucho esfuerzo, a lo mejor es que no te gusta demasiado lo del fútbol...

4) Aunque sea por obligación, alguien que lleva mucho tiempo sin entrenar y que pretenda que otro compañero (que estará en mejor forma) se quede fuera para jugar él, tiene que ser menos egoista y darse cuenta de que eso no es bueno para el equipo. Por eso creo que es lógico que por cada mes que pases sin entrenar, tengas que pasar una semana poniéndote en forma para ponerte más o menos al nivel de tus compañeros y poder volver a competir. Por ejemplo, si te pasas un mes en blanco, qué menos que una semana de entrenamiento, y la siguiente entrenas otra vez y juegas unos minutos (de suplente, claro).

5) Los entrenamientos serán en el pabellón de Suances, los miércoles, de 9 a 10 de la noche.